Septiembre 2022 – ¡A leer!

Septiembre 2022 – ¡A leer!

Refrigerio

Prepare almuerzos en loncheras para las mujeres. Puede incluir una fruta, un sándwich de queso, una cajita de jugo o una bolsa de papitas. Incluya uno de los pasajes bíblicos de abajo en cada lonchera.

Decoraciones

Ponga una pila de libros sobre un mantel negro y una manzana arriba como centros de mesa. Ponga un lápiz en cada silla para que las mujeres se lleven a casa.

Ideas de proyecto de servicio

Solicite a las mujeres que traigan útiles escolares para las mochilas de los niños de los Cuerpos cuyas familias tengan problemas económicos. Pídales que pongan en las mochilas una nota a los niños diciéndoles que orarán por ellos durante el año escolar. Invite a los niños y a sus padres a participar del servicio del domingo y entregue las mochilas. Invite a los niños a ponerse de pie y ofrezca una oración por ellos para el año escolar.

Actividad para compartir

Entregue una tarjeta y un lápiz a cada mujer. Pídales que escriban la tarea para el hogar más difícil que hayan tenido o pídales que compartan una situación en la que hayan olvidado hacer la tarea. Invítelas a compartir si alguien las ayudó cuando estaban en la escuela y cómo las hizo sentir. ¿Hay alguna manera de animar a un niño que viene al Cuerpo?

¡A leer!

¿Han escuchado a un niño decir: «¿Otra vez tarea? ¡No!»? Lo crean o no, los niños sienten que la tarea es una de las peores cosas que les puede pasar. Si mencionan la palabra, empiezan a resoplar y quejarse. Preferirían ver la televisión o pasar tiempo con sus amigos a hacer su tarea. Me acuerdo cuando estaba en la escuela los gritos de celebración de la clase cuando la maestra anunciaba que no habría tarea para el fin de semana. Es posible que a muchos niños no les guste hacer tareas, pero son necesarias para el aprendizaje. Es la forma en que los niños practican y dominan lo que aprendieron en la escuela. En pocas palabras, si quieren lograr sus objetivos en la vida, tienen que leer mucho en casa.

Como cristianas, todos los días tenemos mucha tarea. Si somos sinceras, algunas de nosotras no hemos hecho varias tareas: no hemos leído la Biblia ni hemos puesto en práctica lo que aprendimos. El tiempo que deberíamos dedicar a Dios, lo usamos para ir de compras o ver la televisión, hablar por teléfono, hacer manualidades o para leer revistas. Evitamos hacer nuestra tarea espiritual. David escribe en Salmos 25:5: «Encamíname en tu verdad, ¡enséñame! Tú eres mi Dios y Salvador; ¡en ti pongo mi esperanza todo el día!».

Este salmo refleja el deseo sincero de David de aprender los caminos del Señor y de que Él lo guíe. David estaba frente a un momento difícil y oró para que el Señor le enseñara y lo guiara. David dice que esperará todo el día la guía del Señor y que no se apresurará a tomar decisiones por su cuenta. Durante los momentos más difíciles de su vida, buscó la verdad del Señor. De la misma manera, debemos desear sinceramente que el Señor nos enseñe y nos guíe, especialmente durante los momentos difíciles de nuestras vidas. Cuanto más conozcamos a Dios, más confiaremos en que Su camino es el mejor para nosotras. Cuando nos enfrentamos a la incertidumbre por el futuro, preocupadas por las situaciones presentes o cuando tenemos dolores del pasado, debemos buscar al Señor con el corazón, como lo hizo David. En los tiempos difíciles, lo mejor que podemos hacer es leer el Libro: la Biblia. Es allí donde aprendemos sobre los mandamientos y las promesas de Dios para nuestras vidas. Es en la Biblia donde surge la guía para tomar la decisión correcta.

A veces puede ser intimidante leer la Biblia. Quizá se sientan como niñas que tienen dificultad para terminar la tarea para el hogar. No están seguras de si entienden lo que están leyendo. La mejor parte de leer la Biblia es que el Señor desea ayudarlas a entender. También cuentan con otros creyentes que quieren ayudarlas. Pueden orar como lo hizo David, y el Señor les enseñará y las guiará. En la lonchera del almuerzo encontrarán un pasaje bíblico. Su tarea para esta semana es poner ese pasaje en la práctica en sus vidas y leer la Biblia. Para finalizar, oremos juntas la oración de David.

Oren juntas Salmos 25:5, pida a las mujeres que repitan después de usted.

Versos

«“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas”. El segundo es: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. No hay otro mandamiento más importante que estos» (Marcos 12:30-31).
«“Si se enojan, no pequen”. No permitan que el enojo les dure hasta la puesta del sol, ni den cabida al diablo» (Ef 4:26-27).
«Eviten toda conversación obscena. Por el contrario, que sus palabras contribuyan a la necesaria edificación y sean de bendición para quienes escuchan. No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención» (Ef 4:29-30).
«Abandonen toda amargura, ira y enojo, gritos y calumnias, y toda forma de malicia» (Ef 4:31).
«Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia. Y la constancia debe llevar a feliz término la obra, para que sean perfectos e íntegros, sin que les falte nada» (Santiago 1:2-4).
«No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta» (Ro 12:2).