Meriendas
Sirve meriendas que se puedan comprar sin envoltura de plástico—frutas, vegetales, productos horneados y fiambres. La mayoría de las fiambrerías de los supermercados te permiten usar tus propios envases de alimentos en que llevarte los cortes de fiambres y quesos a casa para crear una linda tabla de charcutería. Incluye elementos horneados que hayan sido hechos con ingredientes comprados en la sección de productos a granel de la tienda de abarrotes o del supermercado. Usa huevos y leche que vengan en cartones reciclables o biodegradables. Las bebidas pueden incluir limonada recién exprimida, té helado en hebras (pues la mayoría de las marcas de bolsas de té están hechas de plástico polipropileno) y agua infusionada con fruta o pepinos.
Decoraciones
Decora con plantas obtenidas de un vivero local. Usa frascos de vidrio como floreros para los arreglos florales.
Actividades
Orador invitado
Invita a alguien a hablar sobre la importancia del reciclaje, de los cambios prácticos que podemos hacer para reducir los desechos u otros temas relacionados que pudieran interesar a las mujeres. Algunas ciudades tienen tiendas de “cero desechos” cuyos dueños son apasionados de este tema y que estarían encantados de hacerles una presentación.
Bolsa reutilizables
Compra una variedad de bolsas reutilizables apropiadas para guardar frutas y vegetales de manera que las mujeres conozcan las alternativas disponibles. Hay muchas variedades disponibles a través de Amazon.
Servicio
Crea kits de iniciación de “Cero Desechos” para la familia y los amigos. Son excelentes regalos. Los elementos que incluye vas desde pajillas de acero inoxidable, vajilla de bambú, bolsas reutilizables para las compras, botella o tazón hermético reutilizable de agua, cepillo de dientes hecho de bambú, servilletas de tela y frascos de vidrio.
Planta un árbol para el Día de la Tierra (Abril 22)
Invita a las mujeres a contribuir a la compra de un árbol que pueda ser plantado en los terrenos del Cuerpo o en un parque cercano. Asegúrate de consultar de antemano al Departamento de Parques de tu localidad.
Limpieza de una playa/parque de tu localidad
Fija un día y una hora en que el grupo pueda ir a limpiar un parque o playa de la localidad. Provee guantes, bolsas de basura y pinzas de brazo largo (en inglés, “reach grabbers”) para recoger los desechos con mayor facilidad. No te olvides de llevar contigo tus botellas reutilizables de agua para hidratarte mientras trabajas.
Recursos (en inglés)
Video: “20 Ways to Reduce Waster | Easy Sustainable Lifestyle Hacks” (20 maneras de reducir los desechos | Hábitos de vida sencillos y sustentables)
https://www.youtube.com/watch?v=kXgELGBuMfA
Video: “More Ocean Less Plastic” | Lia Colabello | TEDxCharleston (Más océano Menos plástico)
https://www.youtube.com/watch?v=6DQjRVnnUHo
Video: “DIY Zero Waste Kit” | Minimalist Life (Kit cero desechos | Vida minimalista)
https://www.youtube.com/watch?v=p_nF8GgKNkM
Blog: My Plastic Free Life (Mi vida libre de plástico)
https://myplasticfreelife.com/plasticfreeguide/
Sitio web: Less Plastic (Menos plástico)
Instagram:
@lifewithoutplastic
@zerowastehome
@packagefreeshop
@trashisfortossers
@zerowasteinspo
¡Cuídalo!
“Dios el Señor tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivara y lo cuidara.”
Génesis 2:15 (NVI)
En el principio, Dios creó el mundo pronunciándolo de viva voz. Su Palabra creó la vida y el orden. Estableció relaciones santas entre todos los seres vivientes; Dios con el hombre, el hombre con la creación y la creación con Dios. Sin embargo, como consecuencia de la Caída, cada una de estas relaciones quedaron maltrechas, sin esperanza de restauración (Gén. 3:14–19). Esto es, hasta que “la Palabra [Jesús] se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros” (Juan 1: 14, NTV).
Cristo, que es la Palabra Viva, da vida (Juan 10:10) a todos quienes Lo reciben. Como aquellos que han recibido la vida abundante que Él vino a darnos, se nos ha dado a nosotras el ministerio de reconciliar el mundo con Dios (2 Cor. 5:17–19). Y como hijas y herederas con Cristo tenemos el privilegio de servir al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo en la re–creación por medio de la cual Él busca restaurar las relaciones que quedaron rotas tras la Caída (Col. 1:20, Ef. 1:10).
La idea de “ser ecológicos” (en inglés, “going green”) ha sido un tema candente desde ya hace bastantes años. Pero debemos tener cuidado de no tratarlo como una moda pasajera o como un pasatiempo de alguien que sólo siente una afinidad con la naturaleza. El cuidado de la Creación es el designio original que Dios estableció para con nosotros como seres humanos, para que “cultivemos” y “cuidemos” el jardín. Es la parte activa que jugamos en hacer que el Reino de Cristo, el Nuevo Cielo, se haga una realidad. Es un acto de obediencia en espíritu de adoración a nuestro Creador, quien ha abierto un camino para que una vez más podamos retomar nuestra relación con Él, restaurando nuestra relación unos con otros, así como con la misma Creación.
Cuando tomamos la decisión deliberada de desechar el uso del plástico en favor de una alternativa sustentable, lo que hacemos es participar en la misión de Dios de restaurar la tierra a su estado original en que todo lo creado “era bueno”. Asumimos nuestra identidad celestial de buenos mayordomos de la Creación cuando optamos por reciclar en lugar de dejar que los desechos que producimos a diario se amontonen en un vertedero o contaminen nuestros océanos, dañando a las criaturas que hacen de él su hogar. Nosotras honramos a Dios cuando cumplimos nuestra parte de sanar a la tierra realizando actos pequeños, pero intencionales, que nos permiten desarrollar un estilo de vida más sustentable.
¿De qué maneras puedes incorporar el “Cuidado de la Creación” a tu vida diaria? Quizás sea haciéndote el café en casa o usando un tazón hermético reutilizable para disfrutar de tu taza por la mañana en vez de usar el vaso de cartón con tapa de plástico que te venden en un café drive-thru. O quizás asegurándote de tener siempre a mano bolsas reutilizables para las compras del supermercado de modo que nunca tengas la excusa de llevar tus compras en bolsas plásticas. O simplemente pedir bolsas de papel en vez de bolsas plásticas. Puedes educar a tu familia sobre la necesidad de reciclar y de comprometerse concienzudamente a procesar de manera sustentable los desechos que producen. Cualesquiera sean los pasos que des a nivel personal, comprométete a hacer todo de tu parte para reconciliar al mundo con nuestro Dios Creador, dándole a Él todo el honor y la gloria mientras lo haces (Col. 3:16–17).
