Introducción

Con tareas que nunca parecen terminar —el cuidado de la familia, el trabajo y otras cosas que demandan nuestro tiempo— solemos preguntarnos cómo encontrar un buen equilibrio en nuestra vida diaria. Estar bien arraigadas surge cuando nos recordamos la protección infalible de Cristo en todas las circunstancias.

Si es posible, realice este programa en un espacio abierto. Podría ser una reunión en un parque o en una senda para caminar cercanos. Si esto es difícil, organice una caminata virtual con una presentación en PowerPoint de la creación de Dios.

Bienvenida

Reúnanse y dediquen un momento a reflexionar sobre la belleza de la creación y el Creador. Pídales a todas que respiren profundamente y reconozcan la importancia de sentirse arraigadas en el momento. A continuación, se muestra un enlace con técnicas de arraigo: https://gestaltvida.com/meditacion-del-arraigo-o-grounding/.

Actividad

Para un espacio abierto

Antes de la reunión, explore el lugar donde hará la caminata. Familiarícese con el nivel de energía necesario y evalúe qué sería mejor para las participantes.

Establezca varios puntos a lo largo de la caminata para detenerse y centrarse en cómo podemos arraigarnos. En cada punto, 1) compartan una parte del devocional; 2) céntrense en la belleza a su alrededor; 3) coman un bocado, beban agua y descansen.

Para un espacio cerrado

Prepare varios puntos alrededor del Cuerpo donde se detendrán las mujeres. Imprima imágenes lindas de montañas, árboles y ríos, y ubíquelas en los puntos donde las mujeres se detendrán para centrarse en ellas. Como música de fondo, puede reproducir una banda con sonidos de la naturaleza. Puede tener varias estaciones de arraigo. Planifique hacer una parte del devocional en cada punto.

Recuerdos

Imprima los pasajes bíblicos y péguelos en las botellas de agua que repartirá durante la caminata o, si la actividad es en un espacio cerrado, colóquelos sobre las mesas.

Decoraciones

Céntrese en la naturaleza y decore las mesas con manteles de color marrón o beis, agregue plantas, velas y piedras. Incluya copias impresas de paisajes hermosos y distribúyalas sobre las mesas.

Refrigerios

• Pida a las mujeres que traigan bocados sanos y agua para compartir o un almuerzo para comer en la caminata.
• Cree una mezcla sana de frutos secos. Aquí hay un enlace para una receta sana de frutos secos:

https://es.wikihow.com/preparar-una-mezcla-saludable-de-frutos-secos.

Compartamos

Durante una caminata, a menudo tenemos momentos de cansancio mientras navegamos caminos difíciles y encontramos pruebas inesperadas (ramas, insectos, lluvia). Estas cosas pueden extender nuestra resistencia. Cuando nos enfrentamos a los desafíos de la vida, nuestra fe también se pone a prueba. Necesitamos dedicar tiempo a arraigarnos en la seguridad de nuestra salvación y en la esperanza de llegar a nuestro destino. Invite a las mujeres a compartir algunas de sus pruebas y dificultades actuales. Pida a las mujeres que se coloquen en círculo y oren por la persona a su derecha.

El suelo para arraigar nuestra esperanza

Lea Salmos 46:1-3.

• Arráiguense en la Palabra para tener una base segura.

¿Cuántas de ustedes se han tropezado con algo en el suelo? En varias ocasiones apoyé mal el pie, y me lastimé. Hay muchas cosas en la vida que nos hacen tropezar. Debemos tener la capacidad de reconocer la verdad de la mentira. Salmos 46:1 dice: «Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia». También sabemos que no hay que temer nada en esta vida porque tenemos esperanza y sabemos que esta vida no es el final de nuestra historia. Si Dios es nuestro Señor y nuestro Padre, viviremos con Él por la eternidad en el lugar que Él ha preparado para nosotras.

• Arraigadas en la oración, no estamos solas.

¿Van solas de excursión o a dar un paseo? Hay momentos en los que anhelamos la soledad que nace de estar a solas en la naturaleza. Incluso en estos momentos de silencio, podemos tener esperanza si recordamos que no estamos solas. Dios es nuestro refugio. Él es a quien podemos recurrir; Él es nuestra fortaleza. Cuando vamos a Él en oración, Él nos acompaña durante nuestro viaje. ¡Entonces somos libres para disfrutar plenamente la vida!

• Arráiguense en el compañerismo; ayuden a otras en el camino.

¿Alguna vez les dio alguien esperanza en medio de una circunstancia difícil? Estos son los momentos que nos ayudan a seguir adelante. A veces tenemos que depender de la ayuda de alguien en un sendero particularmente difícil o empinado. Tenemos que aceptar ayuda, así como ofrecer ayuda a los demás. Dios es nuestra ayuda siempre presente y siempre está ahí para nosotras. Cuando reconocemos esta verdad, tenemos un propósito y somos capaces de continuar incluso cuando los tiempos son difíciles. Dedique tiempo para el compañerismo con Dios y con otras cristianas.

Oración

Querido Señor:

Gracias por la belleza de la naturaleza que has creado. Qué bendición ser parte de Tus muchas creaciones hermosas. Ayúdanos hoy a tener esperanza mientras nos arraigamos en Tu Palabra, en la oración y en el compañerismo. En Mateo 7:24-25, leemos: «Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca. Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa; con todo, la casa no se derrumbó porque estaba cimentada sobre la roca». Ayúdanos a verte como nuestra ayuda y nuestro protector y a construir nuestra vida en Ti, nuestra roca sólida. Confiamos en Ti todo lo que nos preocupa hoy. Amén.