“Estén quietos, y sepan que Yo soy Dios; exaltado seré entre las naciones, exaltado seré en la tierra” (Salmo 46:10, NBLA).

Tema: Él escribe esa nueva historia de nuestra vida que está siempre por escribirse con cada Año Nuevo.

Pasaje bíblico relacionado: “Por tanto, puesto que tenemos en derredor nuestro tan gran nube de testigos, despojémonos también de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos envuelve, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de Él soportó la cruz, menospreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios” (Hebreos 12:1,2. LBLA).

Mesa de adoración

Prepara la mesa de adoración colocando sobre ella una variedad de libros (diferentes versiones de la Biblia y libros escritos por autores cristianos). Asegúrate de colocar la Biblia en el centro.

Diarios personales

Compra diarios personales en una tienda de “Todo a un dólar” junto con un marcapáginas. Alienta a las mujeres a usar su diario personal para llevar un registro de los libros que leen junto con cualquier comentario acerca del tema central de cada libro y las lecciones que aprendieron leyéndolo.

Inscríbete en un Club de Lectoras

Pregúntales a las mujeres si les interesaría comenzar un Club de Lectoras. Muéstrales el primer libro a leer y provee una hoja de inscripción con toda la información pertinente relacionada con el club: fecha de inicio, hora y lugar de encuentro.

Manualidad

Hagan marcapáginas. Hay varias opciones de cómo hacerlos. Consulta en Pinterest las diversas sugerencias que ofrece.

Sopa de letras

Crea una sopa de letras en torno al tema de “Dios el Autor”. Puedes hallar aplicaciones para crear una sopa de letras en Internet.

Guía del encuentro

Bienvenida

Llamado a la adoración—Salmo 119:9–16 (NTV)

Oración de apertura

Ejercicio bíblico—Hebreos 12:2, Génesis 5:1, Éxodo 24:12, Éxodo 31:18,
Éxodo 32:6, Mateo 4:4, Juan 20:31, Romanos 4:24, Romanos 15:4, 1 Pedro 1:6

Canción #336 “Libro bendito, sacro Tesoro”* (al ritmo de Cristo me Ama)

Devoción

Canción #32, “De mi Jesús la historia”*

Oración final

*Cancionero del Ejército de Salvación

Resoluciones de Año Nuevo

¿Has hecho alguna vez una resolución de Año Nuevo? Quizás te hayas propuesto ser más organizada o tal vez volver al college y obtener un título. Puede que hayas decidido ser más amable o gastar menos dinero. O quizás has resuelto leer más libros. ¿Ha resuelto alguna de ustedes escribir un libro?

¿Qué tipos de libros te gusta leer? ¿Novelas policiales? ¿Biografías? ¿Historias de fantasía? ¿Historias de amor? ¿Tienes un autor favorito? Yo me he propuesto al inicio de muchos años leer más libros … pero nunca me he propuesto escribir uno.

Dios tiene muchos títulos—Padre, Proveedor, Sostenedor, Consejero y Autor. Leemos en Hebreos 12:1-2 que Dios es “el autor y consumador de la fe”. El diccionario define un “autor” como alguien que es “el escritor de una obra literaria (un libro, por ejemplo)”. O bien, “alguien que origina o crea algo”. Reconocemos que Dios es el Autor del libro más leído en el mundo: la Biblia. Pero ¿has reconocido que Él es el Autor de tu vida? Él ha escrito de su mano nuestra vida. Cada una de nosotras es una historia única … una historia de amor y gracia. Él ha escrito de su mano nuestros talentos, nuestras pasiones, nuestras convicciones y nuestras personalidades. Ninguna de nosotras es igual a las demás. Incluso los gemelos no son exactamente iguales entre sí; cada uno tiene una historia diferente.

En 2 Corintios 3:2-3 Pablo escribe: “Ustedes mismos son nuestra carta, escrita en nuestro corazón, conocida y leída por todos. Es evidente que ustedes son una carta de Cristo, expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios viviente; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne, en los corazones” (NVI).

Si bien es Dios quien escribe la historia, nosotras muchas veces tratamos de “editar” nuestra historia insertando nuestros pensamientos e ideas, eligiendo opciones por nosotras mismas. A veces Dios deja nuestra historia tal cual y otras veces Él reescribe o edita y cambia el resultado de la historia. Cuando dejamos que Dios haga esto, recibimos Sus mayores bendiciones. A lo largo de tu vida, Dios te ha estado creando tu identidad … en calidad de Autor. Él ha estado dando forma a tu vida presentándote desafíos y logros. Él nos moldea para que seamos cada vez más como Cristo. Mientras menos “editemos”, más podremos ser la mujer que Dios quiso que seamos.

Tu historia no se completará hasta el día en que estés en Su presencia. ¿Cómo irá a terminar tu historia? Oro para que mi historia termine cuando yo lo escuche decir las palabras: “Bien hecho, tú has sido una sierva buena y fiel”.