Bienvenida y oración de apertura
Lectura responsiva
Líder: «A los seis meses, Dios envió al ángel Gabriel a Nazaret, pueblo de Galilea, a visitar a una joven virgen comprometida para casarse con un hombre que se llamaba José, descendiente de David. La virgen se llamaba María. El ángel se acercó a ella y le dijo: —¡Te saludo, tú que has recibido el favor de Dios! El Señor está contigo».
Lectora 1: «Ante estas palabras, María se perturbó, y se preguntaba qué podría significar este saludo. —No tengas miedo, María; Dios te ha concedido su favor —le dijo el ángel—. Quedarás encinta y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Él será un gran hombre, y lo llamarán Hijo del Altísimo. Dios el Señor le dará el trono de su padre David, y reinará sobre el pueblo de Jacob para siempre. Su reinado no tendrá fin». (Lucas 1:26-33).
Todas: Tú, Dios creador, has escrito
Tu gran nombre en la humanidad;
para que crezcamos en Tu semejanza
recordando la vida de Cristo;
para que con nuestra respuesta y servicio
la tierra pueda encontrar su destino (Canción # 1000, cuarta estrofa [en inglés]).
Lectora 2: «—¿Cómo podrá suceder esto —le preguntó María al ángel—, puesto que soy virgen?».
Lectora 3: El ángel le respondió: «—El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Así que al santo niño que va a nacer lo llamarán Hijo de Dios. También tu parienta Elisabet va a tener un hijo en su vejez; de hecho, la que decían que era estéril ya está en el sexto mes de embarazo. Porque para Dios no hay nada imposible».
Lectora 2: «—Aquí tienes a la sierva del Señor —contestó María—. Que él haga conmigo como me has dicho. Con esto, el ángel la dejó». (Lucas 1:34-38).
Todas: Tú, Dios creador, has escrito
Tu gran nombre en la humanidad;
para que crezcamos en Tu semejanza
recordando la vida de Cristo;
para que con nuestra respuesta y servicio
la tierra pueda encontrar su destino (Canción # 1000, cuarta estrofa [en inglés]).
(Lucas 01:26-38).
*Cancionero del Ejército de Salvación
Canción #127 La Virgen María tuvo un Bebé (The Virgin Mary Had a Baby Boy). En español en YouTube: https://www.youtube.com/watch?v=kij9TU4RmaQ
Explicación del proyecto – El sistema de acogida familiar: «Aquí estoy».
Proyectos
Instrucciones
Los proyectos de la lista tienen distintos niveles para acomodar a los distintos grupos. El nivel 1 se puede realizar durante una reunión del Ministerio femenino. Los niveles 2 y 3 incluyen la colecta de objetos. Si es posible, establezca un espacio de la sala de reunión para que las mujeres coloquen allí los objetos durante un marco de tiempo específico.
La temporada de Adviento es acerca de prepararse para la llegada del bebé Jesús. Este proyecto se centrará en los chicos del sistema de acogida, quienes pueden sentir que esta época es especialmente difícil.
Nivel 1
Escriban tarjetas con oraciones y palabras de ánimo para enviar por correo a la Agencia de Acogida Familiar. Si busca en internet, encontrará la agencia más cercana a su Cuerpo.
Nivel 2
Comuníquese con la Agencia de Acogida Familiar y pregunte si tienen una necesidad específica para la temporada navideña. Por ejemplo: pañales, mantas, juguetes, ropa. Haga un plan con los objetos que su grupo puede juntar dentro de un marco de tiempo específico para luego enviarlos a la agencia. Elija a una persona o a un grupo para entregar los objetos.
Nivel 3
Consulte a la Agencia de Acogida Familiar local si su grupo puede «adoptar» a una familia que esté a punto de volver a reunirse. Junte objetos que esa familia podría necesitar. Por ejemplo: ropa, juguetes, comida, artículos para el hogar. Pregunte si un representante de la agencia podría ir a una reunión del Ministerio femenino para dar una presentación sobre el sistema de acogida familiar.
Canción El mensaje de Gabriel https://www.youtube.com/watch?v=ubeSIGRMWPw
Cubiertas por la sombra del Altísimo
En Lucas 1, leemos la historia de Elisabet, una mujer que no podía tener hijos. En esos días, esto era una vergüenza (verso 35) y es probable que esto ensombreciera cada momento de su vida. En Mateo 1, leemos la historia de una mujer soltera que seguramente habría sido objeto de vergüenza y de divorcio por su prometido (verso 19). Una vez más reconocemos que esta situación habría ensombrecido todos los aspectos de su vida.
Por lo general, pensamos que estar en la oscuridad es algo negativo. Nadie lo quiere. No es así como debemos vivir. Sin embargo, a menudo nos encontramos abrumadas por el estrés laboral, problemas con nuestras familias, las tentaciones diarias o por las emociones negativas como la vergüenza y la culpa. Estas emociones nos ponen en la oscuridad, donde es difícil crecer.
En Lucas 1:35, el ángel Gabriel le dice algo interesante a María: «—El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Así que al santo niño que va a nacer lo llamarán Hijo de Dios». Si estar en la oscuridad, a la sombra, es algo negativo, ¿por qué el Señor haría algo así? En cambio, consideren estar cubiertas por la sombra como un poder positivo del Altísimo para protegernos.
Dios tenía un plan para la vida de María. Vemos como se dio ese plan a lo largo de los Evangelios. Primero con la historia de Elisabet y luego con la de María. Ese plan también siguió a través de José, de los pastores y de los hombres sabios. Antes, durante y después del embarazo de María, vemos la mano de Dios orquestando los acontecimientos del nacimiento de Jesús. También vemos cómo Dios protegió a María; primero del divorcio y la vergüenza, luego de los que intentaron lastimar físicamente a su familia. Instruyó a José para que llevara a la familia a Egipto para protegerlos. El poder del Señor cubrió con Su sombra a María, y la protegió. Esto asegura que «al santo niño que va a nacer lo llamarán Hijo de Dios» (Lucas 1:35).
Esta temporada navideña, en lugar de estar bajo la sombra de las cosas terrenales, sean cubiertas por la sombra del poder del Altísimo y confíenmos en que Él las protegerá de las cosas que buscan hacerles daño. Permítanle sobrepasarlas y cubrirlas con Su poder. Encuentren consuelo y esperanza a la sombra de Su poder.
Pensamientos y reflexiones finales
Analice las siguientes preguntas:
- ¿Qué permitimos que ensombrezcan nuestras vidas diarias?
- ¿Cómo podemos permitir que la sombra Dios de nos cubra?
- ¿Cuáles son maneras en las que Dios nos ha protegido?
Oración final
