Pasaje bíblico: Salmos 147:1-4
Octubre es el Mes de la Concientización sobre el Cáncer de Mama. Es un momento maravilloso para alcanzar a las mujeres de nuestro grupo o de nuestra comunidad para reconocer y apoyar a las que sufren de cáncer de mama. Hoy hablaremos sobre cómo Dios cuida a las de corazón quebrantado y venda sus heridas.
Decoraciones
Decore la sala con manteles blancos y decoraciones sobre la mesa de color rosa, como globos o flores, y coloque corazones rosas o blancos que incluyan el pasaje bíblico central. Haga lazos rosa para las mujeres como un recordatorio para apoyar a quienes estén luchando contra el cáncer de mama.
Recursos
Cree un informe sobre el cáncer de mama con los siguientes recursos:
American Cancer Society (la información está disponible en español): https://www.cancer.org/es/
Cancer-Net (estadísticas sobre el cáncer de mama): https://www.cancer.net/es/tipos-de-cáncer/cancer-de-mama/estadisticas
Reconozcan las señales de advertencia y cómo apoyar a alguien.
Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades:
https://www.cdc.gov/spanish/cancer/breast/basic_info/symptoms.htm
Actividad
- Contacte con una organización de lucha contra el cáncer para invitar a alguien a hablar ante su grupo. También puede coordinar con una sobreviviente de cáncer para que comparta su experiencia. Esto hará que el tema sea más personal y ayudará a las mujeres a conectarse con otras.
- Cree una hoja de trabajo «¿Sabía que…?» o un juego con información sobre el cáncer de mama.
- Prepare notas o tarjetas escritas a mano para enviar junto con las almohadas cómodas.
Manualidad
Cómodas almohadas del corazón
Propósito
Estas almohadas están diseñadas para aliviar el dolor de las personas en recuperación tras una mastectomía. Se pueden usar debajo del cinturón de seguridad o para apoyarse sobre ellas y así aliviar la presión y el dolor. Visite el siguiente sitio para ver todas las instrucciones:
https://www.pinterest.at/turbansandc0375/tutoriales-de-almohadas-para-masectomías-almohadas/
En el siguiente sitio encontrará información interesante sobre la almohada del corazón:
https://lasmujeresnosmovemos.org/desde-el-corazon-almohadas-del-corazon-2/
Pueden elaborar estas almohadas para personas específicas que las mujeres conozcan. O puede llamar al hospital local y preguntar si puede distribuirlas entre las pacientes en recuperación tras una mastectomía. Dediquen un tiempo a orar por las mujeres que recibirán las almohadas.
Las de corazón quebrantado
Lea Salmos 147:1-4, NVI.
¿Observó la frase en la mitad del pasaje? «[El Señor] restaura a los de corazón quebrantado y cubre con vendas sus heridas».
Muchas de nosotras nos hemos visto afectadas por el cáncer; ya sea porque lo hemos tenido nosotras o un familiar. ¡El cáncer apesta! Absorbe la vida de una persona; le saca la alegría del corazón, la paz de la mente y puede llevar a la depresión y a la ira. Sin embargo, la Biblia nos recuerda que nuestra alegría está en el Señor. Escuchen las palabras de Nehemías 8:10: «No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza».
Incluso si el cáncer no ha afectado nuestras vidas, todas hemos tenido el corazón quebrantado y experimentado heridas. Algunas de nosotras aquí tienen heridas que han cargado por muchos años. Nos resulta difícil alabar a Dios porque estamos lamiendo esas heridas. Cuando estamos enojadas o centradas en las cosas malas de nuestro entorno, tenemos dificultad para alabar a Dios en la situación actual.
Alabar al Señor cuando no sentimos hacerlo es ofrecer un sacrificio de alabanza. El escritor de Hebreos habla sobre esto: «Así que ofrezcamos continuamente a Dios, por medio de Jesucristo, un sacrificio de alabanza» (Heb 13:15). No dice que ofrezcamos alabanza solo cuando está todo bien. Nos dice que ofrezcamos un sacrificio de alabanza continuamente.
El escritor de Salmos 147 nos recuerda que dejemos de lado nuestras heridas y que recordemos quién es Dios y lo que Él es capaz de hacer. Este es el mismo Dios que cuenta las estrellas y que les pone nombre a todas. El salmista continúa recordándonos cuán grande es nuestro Dios y que Su poder no tiene límites. «[El Señor] restaura a los de corazón quebrantado y cubre con vendas sus heridas. Él determina el número de las estrellas y a todas les pone nombre. Excelso es nuestro Señor y grande es su poder; su entendimiento es infinito» (Sal 147: 3-6).
Muchas veces nos aferramos a lo malo: las malas situaciones, una mala separación; el pasado duele. Todo esto comienza a desgastar el corazón y a veces sentimos que la vida no ha sido justa con nosotras. Nos ha tocado una mala partida. Tenemos un familiar o un amigo enfermo o, quizá, una de ustedes está viviendo con una enfermedad grave. Permitimos que el resentimiento nos vuelva iracundas y amargadas, y culpamos a Dios. Esto nos impide ser lo que Dios quiere que seamos.
Leemos en Proverbios 4:23: «Por sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque de él mana la vida». Cuando se sientan bajoneadas o derrotadas, no permitan que esos sentimientos le roben su alegría. Acudan a la Biblia y aférrense a las promesas de Dios. «Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia» (Salmos 46:1). «Torre inexpugnable es el nombre del Señor; a ella corren los justos y se ponen a salvo» (Pr 18:19). «No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza» (Neh 8:10).
Cuiden su corazón sin importar la mano que les ha tocado. Aférrense a la promesa de que Dios sana el corazón del quebrando y venda sus heridas.