Introducción
El mes de junio es una temporada de finales y comienzos. Es el final del año escolar y el comienzo del verano. Para los graduados, puede significar el final de la escuela y el comienzo de una nueva aventura. Para los oficiales del Ejército de Salvación, el mes de junio suele ser el momento en que terminan de cumplir un nombramiento e inician uno nuevo. Los comienzos pueden hacernos sentir una variedad de emociones diferentes: tristeza por dejar lo que nos ha sido familiar, temor por no conocer lo que nos ha de deparar el futuro, pero también anticipación y emoción por el comienzo de una nueva aventura. Cualesquiera sean los comienzos y finales que enfrentamos en la vida, podemos “estar quietas porque Dios es el Alfa y el Omega” y podemos confiar en que Él estará con nosotras en todas las circunstancias.
Decoraciones
Decora el salón donde se reúnen para una fiesta de graduación. Usa los colores de la escuela secundaria o del college local como los colores distintivos del grupo.
Ideas para el programa
Reconocimiento a los graduados
Si tienes jóvenes (o personas mayores) en tu grupo que se acaban de graduar o se están graduando de la escuela secundaria o del college, invítalos a este programa. Si hay personas que se están graduando del programa del ARC en tu ciudad, también las podrías invitar. Tómate el tiempo para hacerle un reconocimiento individual a cada uno de los graduados. Esto se podría hacer en la forma de una entrevista preguntándoles: el nombre de su escuela, si se están graduando de la escuela secundaria/college/ARC/otra institución, y cuáles son sus planes para el futuro. Planifica hacer un reconocimiento de cada graduado haciéndole entrega de un pequeño regalo. Concluye esta sección del programa orando de manera específica por cada uno de los graduados pidiéndole a Dios que esté con ellos y los guíe ahora que se aprestan a comenzar una nueva aventura en sus vidas.
Tarjetas de aliento/oración
Si los graduados del Cuerpo no pueden asistir a este programa, diles a las mujeres que les escriban notas de aliento asegurándoles que van a orar por ellos. Si tu Cuerpo no tiene graduados, envía las tarjetas a aquellos individuos que están terminando una etapa de sus vidas y empezando una nueva. Por ejemplo: aquellos que han enviudado o se han divorciado recientemente; una nueva mamá que está enfrentando dificultades; una madre o padre que se encuentran solos en casa porque sus hijos recién se han ido del hogar a seguir sus estudios o carreras; aquellos individuos que han recibido un diagnóstico médico que los afectará de una manera negativa; alguien que recién se haya mudado del vecindario; o alguien que se haya mudado de su propia casa a un hogar de ancianos y le está resultando difícil adaptarse a esta nueva situación. También podrían enviar las tarjetas a todos los niños del Cuerpo felicitándolos por haber terminado otro año escolar. Una alternativa adicional es enviar tarjetas a los oficiales y/o sus hijos que se encuentran bajo órdenes de despedida asegurándoles que están orando por ellos durante este período de transición en sus vidas. Explica que los cambios importantes de vida en el mes de junio pueden ser especialmente estresantes para las familias de los oficiales.
Incluye versículos sobre la naturaleza eterna de Dios como un hecho alentador, tal como se aprecia en el Salmo 90:2, Isaías 40:28, 29, Hebreos 13:8 y Apocalipsis 1:8. Dediquen un momento a orar de manera particular por cada una de las personas que va a recibir una tarjeta.
Juegos y entretención
Invita a las mujeres a jugar el juego de mesa conocido en inglés como The Game of Life [El juego de la vida]. Este juego se enfoca en algunos de los comienzos y finales de la vida así como en algunas de sus alegrías y desafíos. Otra opción podría ser la de jugar Chutes and Ladders [Toboganes y escaleras], que también pone el acento en los altos y bajos de la vida.
Sugerencias de canciones de adoración
Del Cancionero del Ejército de Salvación
“Señor, en ti yo creo” (Canción #400)
“Las gracias dad a Dios” (Canción #15)
“¡Oh, Dios, mi Soberano Rey!” (Canción #19)
“Leaning on the Everlasting Arms” (Canción #906)
Coros de alabanza y adoración:
(Se incluyen enlaces para los videos con la letra)
“How Great is our God”, Chris Tomlin https://www.youtube.com/watch?v=wDgmJFw6F64
“Everlasting God”, Chris Tomlin https://www.youtube.com/watch?v=yubLGTOcm8c
“Sovereign”, Chris Tomlin https://www.youtube.com/watch?v=JMTG13qVY3g
“Through it All”, Hillsong Worship https://www.youtube.com/watch?v=RrKbu6OwJv0
El Principio y el Fin
Me encantan los libros y soy una lectora insaciable. Cuando empiezo la lectura de una nueva novela, más vale que el comienzo de la historia me llame la atención rápidamente porque de otro modo la dejo a un lado y no la vuelvo a abrir. Sin embargo, si la historia es cautivante, me cuesta mucho interrumpir la lectura. Reconozco que a veces, si la historia se pone muy intensa y me apasiono por uno de los personajes, doy un salto a las páginas finales para asegurarme de que va a tener un final feliz. A veces, si el final no es como yo espero que sea, puede que incluso no siga leyendo la novela.
La vida tiene que ver con comienzos y finales. ¿Cuáles son algunos de los comienzos que hemos experimentado a lo largo de nuestra vida? (Ejemplos: graduarse de la escuela, empezar un nuevo trabajo, mudarse a una nueva casa, conocer a una nueva amistad). ¿Cuáles son algunos de los finales que hemos vivido? (Cambios en la salud que impactan la calidad de vida o las condiciones de vida, la muerte de un miembro de la familia o de un amigo, encontrarse en casa como padres solitarios cuyos hijos han dejado el hogar para siempre o cambiarse a una casa más pequeña). Algunos comienzos y finales son buenos y otros no lo son. Sin embargo, cualquiera sea el comienzo o el final que estemos enfrentando, podemos estar quietas y relajarnos pues sabemos que Dios es el Dios de todos los comienzos y de todos los finales. Si abres la Biblia en la primera página, el primer versículo que lees es Génesis 1:1 (NTV), el cual dice: “En el principio, Dios creó los cielos y la tierra”. Antes de todas las otras cosas, estaba Dios: Él siembre ha estado. Cuando creó los cielos y la tierra, Él dio comienzo a todo.
Hacia aproximadamente la mitad de la Biblia, en Isaías 44:6 (NTV), Dios dice: “Esto dice el Señor, el Rey y Redentor de Israel, el Señor de los Ejércitos Celestiales: ‘Yo soy el Primero y el Último; no hay otro Dios”. En Apocalipsis 1:8, el último libro de la Biblia, verificamos exactamente lo mismo: “‘Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin’, dice el Señor Dios. ‘Yo soy el que es, que siempre será y que aún está por venir, el Todopoderoso’.” Alfa y Omega son la primera y última letra del alfabeto griego. El hecho de que Dios se llame a Sí mismo el Alfa y la Omega es lo mismo que decir que Él es Dios de la A a la Z, del comienzo hasta el final, desde arriba hasta abajo, desde la partida hasta la llegada, desde el comienzo hasta el final.
Puesto que Dios estaba ahí en el principio, también estará ahí al final. Él es el mismo Dios a lo largo de toda nuestra historia: a lo largo de todo lo bueno, lo malo, lo feo, lo aterrador, lo emocionante, lo común y corriente. Como sea que vaya a ser nuestro futuro, Dios ya conoce todos los vuelcos y momentos de suspenso que viviremos a lo largo de la historia de nuestra vida. Él ya se ha preparado para cada una de las alternativas futuras de nuestra vida. Si bien partes de nuestra historia pueden ser muy dramáticas, ninguna de nuestras experiencias futuras lo van a hallar desprevenido ni con la guardia baja. A menudo olvidamos que Dios es el Alfa y la Omega, el comienzo y el final, y en tales ocasiones podemos quedar presas de la ansiedad, el temor, el pánico, la duda y la desesperación. Pero cuando nos acordamos de lo que Él es podemos sentirnos y estar quietas pues sabemos que Dios es Dios.
¿Qué situaciones hay en tu vida que no te dejan estar quieta y te han estado impidiendo descansar espiritual y emocionalmente en el hecho de que Dios cubre por completo tus comienzos y tus finales y que no hay nada que Dios no pueda manejar? He leído hasta el final la historia de Dios y ¿sabes qué? Para aquellos que Lo reciben como su Salvador, ¡hay un final feliz!
Hora de comprometerse
Materiales: papel de cartulina en la forma de birretes de graduación impresos con las letras de la A a la Z.
Instrucciones: En la cartulina en forma de birrete de graduación escribe —por cada letra del alfabeto— cosas, personas o situaciones que te preocupan. (Alienta a las mujeres a orar por todo lo que escriben en sus listas mientras escuchan la canción “Jesus, Lover of My Soul (It’s All About You)” [Jesús, amador de mi alma: Tú eres todo lo que importa] de Paul Oakley. Para acceder a un video musical que incluye la letra de esta canción en inglés, visita: https://www.youtube.com/watch?v=c9pYTGoX2Ro). Puesto que ya has orado por cada una de las cosas que escribiste en tu birrete de graduación, escribe ahora “Dios es el Alfa y la Omega” en la parte superior de tu lista con un marcador permanente. Así como los graduados suelen lanzar al aire sus birretes como manera de significar que ya han cumplido y terminado su etapa escolar, lanza tú misma al aire el birrete en que has escrito tu lista de preocupaciones como manera de indicar que has dejado de preocuparte de ellas y que vas a dejar que nuestro Alfa y Omega haga Su trabajo.
Bendición
Canten o lean la Canción #1041, “This, This Is the God We Adore” del Cancionero del Ejército de Salvación.