Mi cuerpo – No tiene precio

Introducción

“¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; fueron comprados por un precio. Por tanto, glorifiquen con su cuerpo a Dios.” (1 Corintios 6:19, 20).

Decoraciones

Coloque espejos de varios tamaños alrededor de la habitación para reflejar la luz. Coloque fotografías tomadas de revistas de modelos de varios tamaños y colóquelas sobre las mesas.

Ideas para el programa

• Proporcione exfoliantes o mascarillas faciales que las mujeres puedan probar para que su piel brille.
• Haga que una cosmetóloga demuestre cambios de imagen sencillos para las mujeres.
• Vaya al centro comercial y pídale a un representante de productos de belleza que maquille a una de las mujeres.
• El jabón Dove tiene varios videos en YouTube que muestran la forma en que vemos nuestra imagen corporal. Elija una pareja para compartir con las mujeres y luego analice sus reacciones.
• Reproducir clips de YouTube sobre la imagen corporal y el diálogo que muchas mujeres juegan en sus cabezas.
• Si tiene una tienda de segunda mano, seleccione prendas de la tienda para que las mujeres se las prueben. Para reírse, eliga ropa extravagante.
• Invite a un estilista de ropa a venir y discutir qué ponerse para cada tipo de cuerpo o usar una aplicación que permita a las mujeres probarse la ropa virtualmente. Zyler.com o Virtual Dressing Room son dos de las muchas apps que funcionan de esa manera.
• Hacer muñecos de papel de tamaño natural, ilustrando que todos somos únicos. Haga que las mujeres se acuesten sobre papel de estraza y dibujen alrededor de su imagen. Añade rasgos faciales y ropa.
• Decore un espejo de mano.
• Las siguientes canciones en YouTube tratan sobre el concepto de imagen corporal positiva.
  • “Perfectly Loved” de Rachel Lampa con Toby Mac
  • “Si tan solo ella supiera” de Micah Tyler
• Mire la película de Hallmark, “Romance in Style”, que trata sobre la imagen corporal positiva. Está disponible en Amazon Prime.

Mi cuerpo – No tiene precio

El título, “Mi cuerpo: no tiene precio”, me recuerda a los comerciales de Mastercard donde describen un escenario y luego dicen “No tiene precio”.   1 Corintios 6:19, 20 describe el concepto de ser invaluable de una manera completamente diferente. “¿No sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo (habla de valor inestimable) que está en vosotros, el cual habéis recibido de Dios? No eres tuyo; fuiste comprado por un precio. Por tanto, honra a Dios con tu cuerpo”.   En otras palabras, su cuerpo le pertenece a Dios, y no importa su tamaño, Dios la ama tal como es

No todas somos del mismo tamaño y forma y eso está bien. ¿Cómo y cuándo decidió la sociedad que una talla es el modelo para todos? Dios nos creó y nos vio en lo más íntimo de nuestras madres, incluso antes de que naciéramos, y consideró oportuno amarnos de todos modos. Lea Salmos 139:13-18.

Coco Chanel dijo: “La belleza comienza en el momento en que decides ser tú mismo”. Si bien la premisa básica puede ser cierta, la cambiaría ligeramente para decir: “La belleza comienza en el momento en que decides verte como Dios te ve: como su preciosa princesa”.   El precio que Jesús pagó por nosotros es demasiado alto para que lo ignoremos o nos tratemos mal porque pensamos que no somos hermosos.

Ha habido muchos cambios en la forma de pensar en torno a la “imagen corporal”. Incluso Mattel, el fabricante de la muñeca Barbie, comenzó a fabricar muñecas con más formas… http://www.history.com/news/barbie-through-the-ages. Entonces, incluso los fabricantes de juguetes se dieron cuenta de que el “modelo” clásico no es identificable para muchas mujeres o niñas.   Además, los anuncios para mujeres, ya sea de ropa o de ropa interior, se realizan con una variedad de formas femeninas en lugar de la forma de la muñeca Barbie.

La verdadera Belleza viene de su interior, cuando se concentra en el Espíritu Santo y en cómo Él la dirige. Darse cuenta de que su cuerpo tiene dentro de sí el Espíritu Santo –el propio espíritu de Jesús- es el comienzo de la verdadera belleza.

Oración

Precioso Padre Celestial, ayúdanos como mujeres cristianas a ser conscientes de quién nos compró, Tu Hijo Jesús. Ayúdanos a aceptar la imagen que tienes de nosotras como Tus preciosas princesas.   Que siempre estés cerca de nosotros, animándonos y librándonos de nuestro diálogo interno negativo. Ayúdanos a creer que somos hermosos. En Tu precioso y santo nombre, Amén.