Julio 2019 — Celebremos Su bondad en la Creación

Julio 2019 — Celebremos Su bondad en la Creación

“Tuyo es el cielo, y tuya la tierra; tú fundaste el mundo y todo lo que contiene” (Salmo 89:11).

Introducción

A lo largo y ancho del mundo, los Centros de Adoración y los Centros Comunitarios del Ejército de Salvación son únicos por la arquitectura de su estructura y de sus terrenos. Sin embargo, en la mayoría de los Cuerpos hay una parte de la propiedad que necesita un poco más de atención y cuidado, lo que en inglés se denomina con las siglas TLC (“trimming, labor, compost”), es decir, “podar, mano de obra y abono”. Esto le ofrece al grupo de ministerios femeninos la oportunidad de servir embelleciendo los terrenos del Cuerpo.

Ideas de juegos

Busca en Internet preguntas de trivia, crucigramas o apareando juegos, que ayuden a identificar y diferenciar las plantas y flores de las malezas y las plantas invasivas. Los siguientes son algunos sitios recomendados:

Servicio de Malezas de EE. UU. (Weed Service of America): http://wssa.net/wssa/weed/weed.quiz,
Servicio de conservación de la USDA: https://plants.usda.gov

Oradores

Contacta a cualquiera de los siguientes individuos o grupos para que vengan y les expliquen qué plantas crecen mejor y qué malezas o plantas invasivas hay en tu área: un jardinero certificado, la Oficina del Programa de Extensión de la Universidad y/o el Club de Jardinería de tu comunidad.

Idea de proyecto de servicio

Haz que el grupo de ministerios femeninos escoja una pequeña área de tierra en el Cuerpo al que cuidar y mantener a lo largo de todo un año o más. Habrá que hacer esto por etapas siguiendo las instrucciones que se detallan a continuación:

  • Arranca de la tierra todas las malezas o plantas invasivas
  • Provee tierra fértil y de cultivo en una pequeña área de tierra que hayan escogido—posiblemente abono (conocida también como “compost”)
  • Planten los tipos de plantas que crecen con más facilidad, tanto perennes como anuales
  • Mantengan el cuidado de las plantas y de la tierra y remuevan las malezas del área cada dos semanas durante la temporada de crecimiento
  • Provean al Cuerpo macetas o canteros de flores. Abajo se ofrecen algunas sugerencias:
    • Escojan una pequeña área de tierra o bien macetas de tamaño mediano para iniciar este proyecto.
    • Escojan semillas, brotes florales, vegetales o plantas que den flor para cultivarlas en macizos de flores o en canteros o macetas
    • Provee el tipo correcto de tierra (uno que sea idóneo para plantar semillas) posiblemente un tipo sencillo de tierra de hoja
  • Etiqueta cada cultivo de semillas por su nombre, la fecha en que se la inició y las condiciones climáticas que más la favorecen.
  • Cuida las plantas y semillas mientras van creciendo a lo largo de la temporada
  • Usa los vegetales que hayan cultivados como ingredientes para preparar las comidas del Cuerpo; usa las flores que hayan cortado como decoraciones de interiores o sencillamente disfruten de la belleza que cada planta y sus flores ofrecen.

Las flores—la Creación de Dios

Hay pocas creaciones tan hermosas como un tulipán de color púrpura, un iris amarillo o una peonía en flor durante la primavera. En verano podemos ver y oler las rosas rojas, las hortensias azules o las zinnias naranjas luego de que han florecido. Todas las flores y vegetales pueden proveer belleza y gracia a los espacios que habitan. En cada temporada del año, Dios nos muestra que incluso la más pequeña flor de campanilla de invierno puede proveer una vislumbre de su hermosa creación. Si miras de cerca un iris podrás apreciar por ti misma el detalle intrincado de líneas, manchas y colores que el Señor ha creado en ella como expresión de su variado y exuberante repertorio.

Como parte de nuestra mayordomía para con el Señor, necesitamos cuidar la tenencia de la tierra que Dios nos ha concedido. Tenemos que pasar tiempo removiendo físicamente las malezas y las otras plantas agresivas que las invaden. Se necesita tiempo y trabajo duro para desmalezar bien un jardín.

A medida que desmalezamos el jardín, también debemos preocuparnos de desmalezar las cosas que en nuestra propia interioridad invaden y se apoderan de nuestras vidas sin que en muchos casos siquiera nos demos cuenta de ello. ¿Hay algo que podrías desmalezar de entre las muchas cosas que has decidido hacer en tu vida? Así como Dios permite que las plantas y las flores bien cuidadas florezcan en toda su gloria natural durante la temporada de floración, Él hace lo mismo con nosotras cuando reconocemos que lo necesitamos para florecer espiritualmente y de esa manera volvernos hermosas por dentro.

En el Salmo 89:11 leemos: “Tuyo es el cielo, y tuya la tierra; tú fundaste el mundo y todo lo que contiene”. Nuestro llamado especial es a adorar y alabar a Dios por toda Su creación y es nuestro deber realzar esa belleza arrobadora en los lugares donde Él nos ha llamado a adorar.